La ONG Mundo Azul ha realizado un destape alarmante sobre la matanza indiscriminada de delfines y tiburones en el mar peruano. Se calcula que unos 15 mil delfines son asesinados al año por pescadores artesanales y que las aletas de los escualos son exportadas al oriente.
Stefan Austermühle, Director de la ONG, revela en esta entrevista datos aún más alarmantes sobre el estado del mar peruano, demanda la prohibición legal del uso y posesión de arpones, y reitera la urgencia de una veda a nivel nacional antes de que sea muy tarde.
Las cifras son estimados, ya que en un mercado ilegal no se puede determinar con exactitud un número exacto, pero no puede usarse como argumento para desacreditar una investigación y menos aún tomar medidas ante un delito grave contra el ambiente.
Muchos de los datos más importantes se encuentran entre las últimas preguntas, sin embargo para la mejor comprensión se recomienda leer en el orden que se presenta. Además se adjunta el link a la publicación "Playas de sangre II"¹ con más información de la matanza en la costa peruana.
- ¿Es posible realizar un control de la pesca en el mar peruano?
- Dentro del mar es muy difícil porque nos encontramos con la restricción que la Marina de Guerra no tiene los recursos para estar patrullando todo el tiempo y tampoco tiene suficientes embarcaciones. Hay otro problema que surge cuando una embarcación ve de lejos una nave de la Marina de Guerra: van a eliminar todas las pruebas de su crimen, van a lanzar los restos del delfín por la borda y eso no ayuda en la detención. El tercer problema sería el gran tamaño que tiene el mar peruano (área mayor a 1 millón de km²) que hace casi imposible la búsqueda de una embarcación.
- ¿Qué se puede plantear como solución para la correcta fiscalización?
Pensando en estos 3 problemas, se ve la necesidad de un control permanente en el muelle lo que permite la posibilidad de verificar la intención de cazar delfines: para su captura es necesario el uso de un arpón, una barra de metal de un largo de 1.50 m con una forma muy característica, lo que hace relativamente fácil encontrarlos. Es posible esconderlo pero requiere una energía criminal hacerlo y que las autoridades no lo noten.
Si se realiza el control respectivo antes que las embarcaciones zarpen y al regresar al puerto, se encontrarían una gran cantidad de estos arpones, se podrían incautar y sancionar a los infractores, evitando la matanza de delfines ya que sin esta herramienta no es posible atrapar a los delfines.
- ¿Qué puertos investigó Mundo Azul?
- Mundo Azul envío investigadores encubiertos por todos los puertos entre Paita e Ilo. La pesquisa comenzó mandando gente por los puertos, hablando con los pescadores en febrero de este año.
- ¿Qué otras especies están en peligro a parte del delfín y el tiburón?
Claramente tenemos un grupo de especies protegidas en el mar peruano y que se ven amenazadas por la acción criminal de algunos pescadores artesanales. Estamos hablando de todas las aves guaneras (guanay, pelícano, piquero), de las cuales se registró que el guanay es bastante perseguido, se le mata de manera ilegal y su carne se vende como patillo en los mercados.
También hay tortugas marinas que las atrapan para comerlas, a pesar de la sensibilidad lograda entre los pescadores por el trabajo de las ONGs durante una década. No se salvan los lobos marinos que desde hace generaciones han sido declarados injustamente enemigos de los pescadores y son ejecutados por el hecho de robar peces de las redes. Uno puede comprender la molestia de los pescadores pero matar a este animal no es la solución.
- ¿Y las especies que no están protegidas?
En este caso hablamos de la sobrepesca y embarca a todos los recursos pesqueros que hay en el mar, como los moluscos, los cangrejos y los peces que tienen tallas mínimas y en cuyos casos suele darse que los especímenes que se extraen están por debajo de las tallas por la ausencia de población que genera la sobrepesca desde hace décadas. Esto deja en evidencia la necesidad de un manejo pesquero ya que no se vela de manera adecuada por la sostenibilidad de los recursos pesqueros.
Puede suceder que uno vaya a un restaurante y se coma un rico plato de pulpo al olivo, pero lo más seguro es que se trate de un bebe de pulpo porque ya no hay especímenes grandes. Esto lleva a la población a la desaparición de nuestro mar como ha pasado con la macha y el chanque.
- Si desapareciera el toyo (tiburón), ¿qué sucedería en el ecosistema marino?
Prácticamente ya está desaparecido el toyo y agrupa 7 especies de pequeños tiburones que llegan a medir 1.20 m. de adultos, que no atacan a las personas. Sin embargo, se les ha cazado desde los años 70 por volúmenes y en la década de 1990 empezó a decaer la población. Hace 6 años aproximadamente, el Instituto del Mar del Perú (IMARPE) comenzó a recomendar la pesca de tiburones más grandes como el martillo, el tiburón diamante y el tiburón azul como una alternativa a la pesca del toyo que desapareció de manera alarmante.
Hoy en día, la carne de estos tiburones grandes se vende con el nombre de toyo pero no lo son. Y en esos 6 años, estas poblaciones de tiburón ya han llegado al nivel en que la taza de pesca de especímenes juveniles sobre pasa el 90% lo que es la sobrepesca. Cuando IMARPE comenzó a promover esto, se criticó a través de un informe la decisión tomada ya que a nivel internacional se está protegiendo los tiburones por su desaparición y el instituto no contaba con una investigación del estado de la población ni del manejo pesquero de los tiburones recomendó la pesca de estos animales. El resultado de promover una pesca sin tener un manejo adecuado es lo que vemos ahora.
- ¿Cuántas embarcaciones y puertos debería intervenir IMARPE a nivel nacional para realizar el estudio necesario del caso?
Para mí el estudio es una tontería a estas alturas porque ante la demora para tomar acciones concretas van a encontrar con que ya no hay nada que proteger y el resultado del estudio será nulo. En el Código de conducta de la pesca sostenible de la FAO² hay reglas muy claras, siendo una importante la de precaución, según la cual el Estado por precaución ante un indicio y no necesariamente un estudio completo debe declarar una veda.
Entonces, primero se declara la veda y luego se comprueba si se puede pescar o no. El código de la FAO pone el deber de la prueba a quien quiera pescar y no al que busca conservar, pero hoy día es al revés, es ilógico que la prueba la presente quien desea conservar y probar que hay un riesgo para que recién se proteja una especie. Mientras que el código de conducta tiene una intensión que es al revés: primero se busca la protección y quien desee aprovecharla debe comprobar que con su manera de aprovecharlo no producirá daño. Y eso es lo que debe realizar el gobierno.
- ¿Esto no significaría además que en los puertos hubiera un control de la pesca con balanza? Pero solo se hace una medición con la anchoveta.
- El tema de la balanza puede ser ir por las tallas aunque suelen cortar la cabeza del tiburón en el mar y no se logra saber con seguridad el tamaño pero se puede calcular. Definitivamente uno se da cuenta que debe tener una talla mínima de 1.60 m. no puede llegar al puerto y tener solo 80 cm., la cabeza no es tan larga, así que se trata de una cría en crecimiento. Claramente se puede controlar por el tamaño.
- ¿La veda sería entonces solo un punto inicial?
- Ya se tiene una situación de sobrepesca por dos estudios comprobados hace más de 2 años en dos puertos. Tal vez no sea a nivel nacional pero en 2 de 5 puertos hay un nivel de sobrepesca tremendo lo cual es suficiente indicación para estar alarmados y toma una medida de precaución. Esta medida dice que cerremos el tema ahora y después, teniendo tranquilidad, se investigara y se deducirá si se puede o no pescar bajo las medidas de cuidado y no al revés como lo dice el Estado.
- ¿Al tomar estas medidas no habría repercusiones con otras especies para compensar la ganancia que les daba el tiburón y delfín?
- Bueno, eso suele pasar, que las embarcaciones que no pueden capturar una especie por veda conviertan su equipo para pescar otra cosa. Esto es así en todos los tipos de pesca, ya sea con anchoveta o merluza puede pasar lo mismo. Es ilógico pensar que solo por eso se debe permitir una pesca sin control y sobre todo cuando se trata de un hecho penado por ley. La pesca del tiburón está conectada a la matanza de delfines, mientras se de esta situación no es lógico permitir que la actividad continúe. Hoy día uno no puede comer toyo sin tener la duda de que de por medio hubiera muerto un delfín. Matar un delfín no es violar una medida administrativa del Ministerio de pesca que requiera una multa, sino un crimen ecológico estipulado en el código penal cuyo castigo es de 3 a 5 años de cárcel. Se trata de un crimen y por lo tal no se debe tolerar bajo ninguna excusa.
- ¿Habría repercusiones a nivel internacional? Después de todo, el Perú firmó el Convenio de CITES sobre el comercio de cetáceos y sus productos.
- Al final los convenios no tienen injerencia sobre la legislación nacional en el sentido que la comunidad internacional no nos puede castigar como país. Lo que va a pasar por violar los convenios es tener presión diplomática para que cumplamos con lo establecido. Pero el caso acá es diferente del de Japón, donde la pesca de delfines es legal y el Estado japonés pone una cuota para pescar una cantidad determinada al año, así como acá se pesca anchoveta o merluza. La política del Estado peruano afirma que el delfín es un animal protegido por lo que matarlo es cometer un crimen. Nuestra situación es diferente. Si bien estamos casi igual que en los estimados de matanza de Japón, ese no es el tema, por eso pregunto qué es peor: cometer un crimen o realizar una actividad que a otros no les gusta.
- El destape de Taiji en Japón reveló un negociado bajo la mesa. En nuestro caso, de la pesca de delfín para usarlo como cebo para el tiburón, ¿hay algo similar?
No lo sabemos aún pero es necesario seguir investigando. Por otro lado, los pescadores ya reaccionaron y están quejándose por las cifras, afirmando que nosotros como ONG no tenemos derecho de opinar sobre el tema, que no somos pescadores y vienen con nefastas ideas. Nos han dicho que hemos contratado la matanza de delfín, que todo es sensacionalismo, que buscamos canalizar dinero y una serie de cosas para desacreditarnos que es su única forma de reaccionar pues no tienen ningún argumento contra la realidad que se mostró en video.
Si fuera así, significa que fue una farsa y que contratamos 2 embarcaciones, que los pescadores pactaron matar delfines frente a la cámara, y que afirmaron que lo hacen todos los días solo por dinero. Es descabellado. No es así, nosotros pasamos más de medio año entrevistando unas 20 personas con cámaras ocultas pero como no tienen argumentos solo les queda intentar desprestigiarnos.
- Mencionas que la pena para los pescadores es de 3 a 5 años, ¿pero qué tipo de pena es?
- No es una pena efectiva lamentablemente por lo cual el juez en algún momento dará un fallo favorable y serán puestos en libertad. Por esto nosotros creemos que la pena debe aumentarse a 4 años mínimo para que sea efectivo. La gente que comete un crimen ambiental debe ir a la cárcel y esto no lo dice un alemán que no es peruano, estas lo ha dicho el Ministro del Ambiente en su primera reacción a las imágenes, yo solo repito esas palabras.
- En el caso de los pescadores que afirman que necesitan los ingresos que tenían con el delfín y tiburón para subsistir, ¿qué alternativa les podría dar el Ministerio de la Producción?
Primero que no es una pesca para subsistir, porque las personas que salen al mar y pescan sus 6 toneladas³ de tiburón puede ganar S/.60 mil al regresar a puerto, con un costo de S/.15 mil en la salida, es decir una utilidad de S/.45 mil por salida de 20 días con una buena pesca. Si es un buen empresario se puede manejar económicamente muy bien con malas y buenas pescas intercaladas.
Una muestra clara es la primera embarcación en la que estuvimos, que valía US$35 y cuyo dueño tenía 26 años, quien tiene su crédito de banco, un buen bote y sigue pescando, no es nada pobre. El dueño del otro bote donde subimos estaba por comprarse una segunda embarcación. Son microempresarios exitosos que cambian los aparejos de pesca 3 veces al año y se dan el lujo de hacer una temporada de pesca de tiburón con espineles (red larga con múltiples anzuelos), otra de perico con otro tipo de espineles, red de tiburón con redes de fondo y suelen cambiar. Estas personas cometen un delito grave y no son pobres, ni siquiera siendo pobres tienen derecho a cometer un delito. La ley se debe respetar y no se debe permitir mandar un mensaje equivocado al país.
- Mundo Azul ha hecho investigaciones sobre los delfines que pasan por nuestra costa, ¿qué especies están en peligro?
- No hay ningún estudio poblacional de ninguna especie de delfín o cetáceo en el país. En este campo, nuestro trabajo ha sido una foto-investigación de 7 años entre Lima y Paracas, que solo son 200 km. (6% de la línea costera peruana). Del conteo cercano a la playa encontramos 600 bufeos residentes y otros mil que pasaron una sola vez en ese tiempo, pero no sucede en toda la línea costera (no hay delfines al norte de Lima ni al sur de la Reserva de Paracas). No tenemos la menor idea de cuantos hay en el país y esa es la única especie de la cual se ha investigado algo.
- ¿Qué medidas correctiva sugieres que tomen las autoridades posterior a la veda?
- Tres medidas principales: prohibición legal del uso y posesión de arpones, así no podrán arponear ni cazar un solo delfín. Lo segundo es implementar la legislación que existe y hacer operativos en los mercados para capturar a los vendedores ilegales de carne de delfín. Finalmente, a largo plazo llegar a un sistema de manejo de pesca de tiburón de manera sostenible y estudiado, para ya no tener una veda total y permitir la pesca en un régimen pesquero sostenible bien monitoreado, y no más a la deriva pescando lo que sea.
- En el caso del tiburón, después de quitarle las aletas para exportar, ¿se lo comen o lo lanzan al mar?
- No lo lanzan, acá no tenemos esa terrible práctica de botar el cuerpo entero. Acá venden la carne bajo el nombre de "toyo" y se consume a nivel nacional. Pero es peligroso porque contiene mercurio⁴.
- ¿Qué rol desempeñan los delfines y tiburones en nuestro mar?
- Ambos son predadores tope que mantienen el equilibrio en el mar ya que comen todos los peces por debajo de ellos evolutivamente. En su mayoría, comen peces lentos, viejos y enfermos, que de llegar en las redes de los pescadores a los terminales podrían enfermar a las personas. Esto a su vez genera que ambos animales contengan un alto porcentaje de mercurio en su carne ya que van acumulando metales tóxicos vertidos por el hombre en los mares.
- En Japón, la sobrepesca de ballenas ha generado la aparición de medusas⁵, ¿podría suceder lo mismo acá?
- Claro que sí. En la década de 1970 unos 50 mil cachalotes fueron cazados de nuestro mar por japoneses desde la estación ballenera que tenían en Paita. Estos cachalotes podrían seguir vivos pues llegan a los 80 años de edad humana y cada uno come en promedio 0.6 toneladas de pota diarios. Haciendo un cálculo simple, son miles de toneladas por día de pota que no fueron consumidas y que pasados ya 40 años, hay billones de toneladas de pota no consumida en nuestro mar que no ha dejado de reproducirse. Ahora tenemos una plaga de pota en todo el mar peruano, pues la cantidad extraída por la flota pesquera es un mínimo porcentaje de lo que comen los cachalotes cada día. Por todo esto ya hemos desequilibrado el mar peruano eliminando un predador tope, así que no se puede repetir nuevamente con los delfines y tiburones.
- Acerca de la sangrienta pesca:
- Para pescar tiburones no solo se usa la carne de delfín, sino una mezcla de pescado congelado y pota para atraer a las diferentes especies de escualo. No se puede por lo tanto calcular cuántos delfines son muertos por la cantidad de tiburones pescados.
- Para atrapar delfines (que son más veloces que las embarcaciones) los pescadores afirmaron que debían esperar a que pase un grupo cerca a ellos para jugar. Según los pescadores, ellos atrapan entre 1 y 10 ejemplares por salida, de los cuales 3 o 4 de ellos son usados para la pesca de tiburón en una salida de 20 días.
- Las cifras son estimados, ya que en un mercado ilegal no se puede determinar con exactitud un número exacto, pero no puede usarse como argumento para desacreditar una investigación y menos aún tomar medidas ante un delito grave contra el ambiente.
- No solo los delfines están en peligro (bufeos, delfín oscuro y delfín común), también la marsopa a la que los pescadores suelen llamar chancho marino y otros animales como se ha mencionado en la entrevista.
- Más información:
¹ "Perú - playas de sangre II", ONG Mundo Azul: http://www.mundoazul.org/descargas/playas_de_sangre_II_austermuhle.pdf
² Documento de la FAO sobre el Código de conducta de la pesca sostenible, publicado en la web oficial y de acceso público: ftp://ftp.fao.org/docrep/fao/005/v9878s/v9878s00.pdf
³ Un tiburón adulto oscila entre los 120 k. y 150 k. pero hace 10 años que los pescadores no los encuentran. Los tiburones pescados durante la investigación eran especímenes de 80 cm. que tendrían entre 30 k. y 40 k. por lo que 6 toneladas equivalen a un promedio de 200 tiburones muertos en menos de 1 mes.
⁴ Ric O´Barry habla sobre el mercurio en la carne de tiburón y delfín: http://www.larazon.es/detalle_hemeroteca/noticias/LA_RAZON_288213/8712-el-oceano-esta-lleno-de-mercurio-si-analizas-un-trozo-de-sushi-te-quedarias-horrorizado#.Umi4qaJg83M
⁵ Plaga de medusas: http://www.finanzas.com/xl-semanal/conocer/20130804/medusas-invaden-5945.html
